Nota Sin Límites (Limitless, 2011)

MEDIO: Revista La Cosa
FECHA: Septiembre 2011
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Hay drogas pero no es Kids. Hay viajes astrales pero no es Trainspotting. Hay sacudones de caballo pero no es Réquiem para un Sueño. Estamos hablando de Sin Límites, la nueva película de Bradley Cooper donde interpreta a un escritor que, con cierta pastillita, tiene todas las de ganar. Claro, como nuestro Hernán Panessi, quien –al igual que el protagonista- sólo logra concentrarse cada vez que invoca a Focusín.

Dice Gabriel García Márquez, en “Cómo se cuenta un cuento”, que “para escribir tienes que creerte mejor que Cervantes, porque si no, acabas siendo peor de lo que en realidad eres”. A propósito de los síndromes de bloqueos crónicos, quienes están -en general- acompañado por deudas, runflas sentimentales y alguna que otra droga, está Eddie Morra (Bradley Cooper), un aspirante a escritor. Pese a haber obtenido un adelanto por publicar un libro no rescata palabra alguna. Pasan los días y nada mágico sucede. Intenta concentrarse, pasar tiempo en su cuarto, jugar al basketball con la pared pero la inspiración jamás le llega. Para colmo de males, su novia, Lindy (Abbie Cornish), lo abandona después de señalarlo por poco más que ser dependiente de sus finanzas. Su vida dará, entonces, un giro inesperado cuando un viejo conocido le ofrezca un medicamento experimental que le permitirá aprovechar todo su potencial: el NZT-48. Se trata de un experimento farmacéutico que optimiza el uso del cerebro pasando del 20% -aunque el mito neurológico diga que sólo usamos el 10%- al límite del 100% en forma tanto instantánea como simultánea.
¿Es nuestro cerebro una isla cuyo tesoro oculto es el poder ilimitado de la mente? ¿Y si una droga pudiera desbloquear todo ese potencial? A partir de ahí, la historia de Sin Límites (Limitless, 2011) le hará honor al nombre poniendo a su protagonista a escribir como una máquina, aprender idiomas con sólo escucharlos, ejecutar artes marciales recordando las películas que en su momento vio, etc. Todo lo que haya tenido contacto con su cerebro lo tiene, cual sistema operativo de avanzada, ordenado y clasificado listo para su apropiada utilización.
De esta manera, Eddie, un tipo por el que nadie daba un peso, no tardará hasta obtener sus primeras recompensas económicas gracias al NZT. Tal es así que de la noche a la mañana cosecha una fortuna en Wall Street llamando la atención del poderosísimo magnate Carl Van Loon (Robert De Niro). Éste lo invitará a formar parte de la fusión corporativa más grande de la historia pero no todo serán buenas noticias. Las dosis de NZT escasean cada vez, lo entrometen en algunas tramas policiales y deberá, además, huir de un mafioso prestamista que lo atormenta. También descubrirá, pequeño detalle, que las pastillas tienen efectos colaterales adversos a su salud, poniendo en riesgo su propia vida.
La película, dirigida por Neil Burger y producida por el mismo Cooper, luce muy bien acompañada por esa cámara movida a toda velocidad por las calles de la siempre cinematográfica Nueva York. En consecuencia, Sin Límites, thriller de ciencia ficción emparentado con algunos conceptos de El Origen (The Inception, 2010) y El Club de la Pelea (Fight Club, 1999) –ambas, casualmente, de David Fincher-, recorta todas las superficialidades y los dramas innecesarios para retratar a la acción como único escenario posible. Si lo que quieren es probar una dosis de faena lisérgica, más unas cucharaditas de tiros, agregándole el sabor del perdedor-ganador en escalada meteórica, sostenido por la presencia del facha de Bradley Cooper, Sin Límites es, definitivamente, su película a considerar.

Bradley Cooper, el chico de oro

A la lista de galanes de Hollywood le ha cabido un merecido F5. El olimpo femenino ya no está sólo ponderado por la Santísima Trinidad de Johnny Depp, Brad Pitt y George Clooney. Ahora, Cooper, nacido en el año 1975 en la ciudad de Filadelfia, a fuerza de talento y pintita, no para de ganar suspiros y de colocarse entre los actores más buscados de toda la industria. Desde sus comienzos, allá por el año 1999, en Sex and the City (1998 - 2004), hasta su Phil de ¿Qué pasó ayer? (The Hangover, 2009) y ¿Qué pasó ayer? Parte II (The Hangover Part II, 2011), ha encandilado a las plateas del mundo. Después de algunos papeles secundarios, como en Los Rompebodas (Wedding Crashers, 2005), la carrera de Cooper empezaría a remontar, sobre todo, con su actuación en ¡Sí Señor! (Yes Man!, 2008). Así, uno de sus primeros protagónicos lo conseguiría en Simplemente No Te Quiere (He’s Just Not That Into You, 2009), junto con Jennifer Aniston –a quien se la vinculó sentimentalmente-. De esta forma, sin parar hasta convertirse en un taquillero con la obra de Todd Phillips y su Faceman de Brigada A (The A-Team, 2010), Cooper se ha transformado en uno de los galanes más codiciados de todo Hollywood. Incluso, lo han barajado en muchísimos proyectos importantes de los últimos tiempos, tal es el caso de Linterna Verde (Green Lantern, 2011) –los rumores apuntan que perdió el rol imitando a Batman en el casting-, papel que tomaría finalmente Ryan Reynolds. O mismo otro héroe de DC como The Flash (2013) y algunos reboot de Marvel como Daredevil (2014). Además, por si fuera poco, se habla que protagonizaría una supuesta remake de El Cuervo (The Crow, 1994). Por lo visto, a Bradley Cooper, el nuevo niño de oro de Hollywood, como pasa con los grandes de verdad, el destino le depara mucho trabajo y rumores de los buenos.

Farmacia La Cosa
Comprimidos varios que han hecho las delicias de la cultura pop.

Chiquitolina en El Chapulín Colorado (1972 - 1979) | El héroe carmesí se suministraba esta pastilleta para hacerse extra small y encarar, con ello, diversos desafíos.

Semillas del ermitaño en Dragon Ball Z (1986 - 1989) | Cultivadas por el maestro Karin, bien naturistas, aliviarán los golpes más que un desinflamatorio en crema.

Hypnocil en Pesadilla en Elm Street 3: Guerreros del Sueño (Nightmare on Elm Street 3: Dream Warriors, 1987) | Los jóvenes usan una píldora que evita sueñen con Fred.

GLeeMONEX en Brain Candy (1997) | Un antidepresivo se convierte en furor de la noche a la mañana por atrapar a las personas en sus recuerdos más felices.

Blue Pill/Red Pill en Matrix (The Matrix, 1999)| El debate de Neo resulta entre optar por una u otra. Dosis de fantasía o realidad proveída en capsulas colorinches.

Tic Tac Naranjas en La Joven Vida Juno (Juno, 2007) | La recomendación pasa por dejar cajitas en el correo de tu amad@. El resultado, más psicológico que médico.

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